jueves, 20 de noviembre de 2008
Los viajes de Rudy
Cuenta Rudy en su blog que esta semana ha hecho la primera gran gira de la temporada, algo que será habitual el resto del año. Durante la pretemporada jugaron varios partidos fuera de casa, pero esta vez el viaje es más largo y duro (10 días, en los que juegan 5 partidos). Costa a costa. Cuenta Rudy que jos jugadores van en su coche, no en autocar como en Europa, al aeropuerto la noche antes del primer partido fuera (en la NBA nunca se viaja el mismo día de partido), los dejan en el parking en el aeropuerto, y suben al avión privado del equipo (sin tener que pasar controles de seguridad como en los vuelos comerciales). En cuanto llegan a la ciudad de destino y van directos al hotel y ahí, también de forma diferente a Europa, ya que les dejan libre hasta el próximo entreno o reunión. Los jugadores tienen habitaciones individuales, pueden comer por su cuenta, etc. Al día siguiente, sesión de tiro, partido por la tarde y luego directos al aeropuerto otra vez... y vuelta a empesar
Si el baloncesto fuera como el futbol, ...
"Si el baloncesto fuera como el fútbol…
El público lanzaría insultos racistas… a los jugadores blancos.
El tiempo de juego lo controlarían los árbitros con sus relojes de pulsera, "a ojo". Por una increíble casualidad, los dos primeros cuartos durarían casi siempre 10' 30", y los dos últimos cuartos, 11'. El tiempo de posesión vendría dictado por el aburrimiento de los árbitros y por sus ganas de salir corriendo hacia el otro campo.
Los finales ajustados serían aburridos; el equipo que llevara una mínima ventaja se dedicaría a esconder el balón, lanzarlo a la grada, etc. Si fuera a favor del equipo local, las animadoras aparecerían en la pista interrumpiendo el juego "accidentalmente".
El juego tendría que pararse cada 2 minutos para limpiar la pista de escupitajos lanzados por los jugadores. Probablemente los asistentes/limpiadores se pondrían en huelga y dejarían de hacerlo. Aumentarían las lesiones por resbalones.
En cada bloqueo o rebote, algún jugador fingiría una rotura de costilla y/o dislocación de meñique, retorciéndose en el suelo. El equipo con posesión del balón lo tiraría fuera, y el otro equipo se lo devolvería a continuación. Todos se aplaudirían entre ellos ante tal alto grado de deportividad, mientras se proponen mutuamente como candidatos al premio Nobel de la paz.
El público lanzaría papeles y otros objetos a la pista, cosa que se consideraría normal. El juego no se detendría por eso. Es más, ayudaría a tapar algunos escupitajos.
Los entrenadores perdedores se excusarían en la mala suerte o en las decisiones del árbitro. También cuando perdieran de 30 puntos. Siempre.
Podrías realizar otras actividades (cenar, sudokus, dar una conferencia …) al mismo tiempo que ves un partido sin perderte nada importante. De hecho, al día siguiente podrías perfectamente opinar sobre el partido, a pesar de no haberlo visto ni saber cómo quedó el resultado.
Cualquiera podría ser comentarista de baloncesto sin tener mucha idea. ¿Alguna vez han oído a un comentarista de fútbol decir algo que no pudiera haber dicho cualquier aficionado?
La prensa todavía estaría discutiendo si Romay tiene que ir a la selección o no"
Jordisan
El público lanzaría insultos racistas… a los jugadores blancos.
El tiempo de juego lo controlarían los árbitros con sus relojes de pulsera, "a ojo". Por una increíble casualidad, los dos primeros cuartos durarían casi siempre 10' 30", y los dos últimos cuartos, 11'. El tiempo de posesión vendría dictado por el aburrimiento de los árbitros y por sus ganas de salir corriendo hacia el otro campo.
Los finales ajustados serían aburridos; el equipo que llevara una mínima ventaja se dedicaría a esconder el balón, lanzarlo a la grada, etc. Si fuera a favor del equipo local, las animadoras aparecerían en la pista interrumpiendo el juego "accidentalmente".
El juego tendría que pararse cada 2 minutos para limpiar la pista de escupitajos lanzados por los jugadores. Probablemente los asistentes/limpiadores se pondrían en huelga y dejarían de hacerlo. Aumentarían las lesiones por resbalones.
En cada bloqueo o rebote, algún jugador fingiría una rotura de costilla y/o dislocación de meñique, retorciéndose en el suelo. El equipo con posesión del balón lo tiraría fuera, y el otro equipo se lo devolvería a continuación. Todos se aplaudirían entre ellos ante tal alto grado de deportividad, mientras se proponen mutuamente como candidatos al premio Nobel de la paz.
El público lanzaría papeles y otros objetos a la pista, cosa que se consideraría normal. El juego no se detendría por eso. Es más, ayudaría a tapar algunos escupitajos.
Los entrenadores perdedores se excusarían en la mala suerte o en las decisiones del árbitro. También cuando perdieran de 30 puntos. Siempre.
Podrías realizar otras actividades (cenar, sudokus, dar una conferencia …) al mismo tiempo que ves un partido sin perderte nada importante. De hecho, al día siguiente podrías perfectamente opinar sobre el partido, a pesar de no haberlo visto ni saber cómo quedó el resultado.
Cualquiera podría ser comentarista de baloncesto sin tener mucha idea. ¿Alguna vez han oído a un comentarista de fútbol decir algo que no pudiera haber dicho cualquier aficionado?
La prensa todavía estaría discutiendo si Romay tiene que ir a la selección o no"
Jordisan
jueves, 6 de noviembre de 2008
Ivan García
Iván García es un alero de 2,04 formado en las categorías inferiores del Fútbol Club Barcelona. Se proclamó Campeón de Europa sub-18 con la mágica selección española del campeonato celebrado en 2004 en Zaragoza, donde compartió equipo con Sergio Rodríguez y José Ángel Antelo entre otros. Yo le he visto jugar dos partidos a razón de un minuto por partido, en ambos casos ha tenido la valentía de jugarse un triple en cada partido ¡¡y meterlos!! ¿qué más necesita Curro Segura para sacarlo más??
sábado, 1 de noviembre de 2008
Ru-dy, Ru-dy, Ru-dy
Sale Rudy y los americanos se vuelven locos: ¡¡ Ru-dy, Ru-dy. Ru-dy!! gritaba el pabellón. No estuvo mal el partido, rebotes, asistencias, sólo un triple, pero es que vaya partidazo de Brandon Roy que se las chupaba todas, ...